Entrenar con aire acondicionado

Cuidar de nuestra salud es algo muy importante, y para hacerlo hay muchas personas que no dejan de entrenar ni en verano. A pesar del calor agotador que puede bajar el rendimiento deportivo e incluso afectar a nuestra motivación, entrenar regularmente es algo que hacemos para sentirnos bien. Pero ¿cómo se puede hacer sin que nos afecte el calor?

Se dice que entrenar con el aire acondicionado encendido es muy perjudicial para la salud, y por este motivo algunos acaban por abandonar su rutina, ya que con las altas temperaturas se hace verdaderamente pesada la actividad física.

Es bueno saber que esa afirmación es totalmente falsa, simplemente hay que utilizar el aire acondicionado correctamente y teniendo en cuenta algunas pautas para que sea beneficioso y podamos cumplir con nuestros objetivos deportivos.

Los efectos del calor

Cuando llega el verano nos apetece aprovechar los días de Sol y el tiempo libre, pero muchas veces las temperaturas son tan altas que terminan por provocar efectos en nosotros que nos impiden llevar a cabo muchos planes.

El calor puede afectar a nuestro cuerpo produciendo síntomas molestos que pueden hasta incapacitarnos para realizar ciertas actividades. Un golpe de calor podría ser muy nocivo y no deberíamos arriesgarnos a sufrir uno, pero no es necesario para sentir el peso de las altas temperaturas, porque puede reflejarse en nosotros con dolores de cabeza, dificultad respiratoria y fatiga, ya que el corazón tiene que esforzarse más para regular la temperatura corporal.

Para controlar la situación y optimizar las condiciones para el trabajo físico podemos recurrir a hacer un uso correcto del aire acondicionado.

También es importante señalar que la temperatura puede afectar seriamente al estado de ánimo, sentirse incómodos por el calor provoca que nos desmotivemos y perdamos las ganas de estar activos, así que ¡hay que cuidar de nuestra motivación!

Temperatura ideal para hacer ejercicio

Al igual que el calor puede afectar negativamente para la realización de actividad física, el frío también puede ser dañino para nuestro cuerpo, los músculos pueden resentirse y ponerse rígidos, al igual que podemos resfriarnos con el cambio drástico de temperatura. Así que si vamos a utilizar el aire acondicionado para entrenar deberemos mantener una temperatura adecuada, que rondaría los 25°, no es una temperatura ni muy baja ni muy alta, y la diferencia entre esta y la temperatura exterior no supone un contraste exagerado.
Bajar la temperatura a menos de 25° ya podría resultar arriesgado y facilitar la aparición de lesiones, hay que tener en cuenta que la temperatura corporal tiende a subir cuando estamos ejercitándonos.

A tener en cuenta

También es conveniente recordar que el aire acondicionado, cuando ya lleva un rato funcionando, empieza a secar el ambiente, y este factor es de gran peso, no solamente cuando hacemos ejercicio, sino que en cualquier situación. Es recomendable utilizar un programa que no favorezca la eliminación de la humedad.

Hay dos pilares esenciales que debemos cuidar cuando hacemos ejercicio, y son:

1. La ventilación: Cuando hacemos deporte, la respiración es fundamental, con ella oxigenamos nuestro cuerpo y regulamos el rendimiento, por ese motivo, es de gran relevancia ventilar la sala. El aire que respiramos debe ser lo más limpio posible y al realizar actividades físicas las personas expulsamos más CO2 de lo habitual. Ventilar el espacio en el que estamos haciendo deporte es de gran importancia, ya sea en nuestras casas, en gimnasios o cualquier otro tipo de local.
2. Hidratación: Con la aceleración del ritmo cardíaco el cuerpo sube de temperatura y empieza a transpirar para autorregularse y eliminar toxinas. Es una parte natural de hacer ejercicio, pero no hay que olvidar que es de vital importancia ocuparnos de mantenernos hidratados. Teniendo en cuenta los efectos que tienen en nuestros cuerpos la sudoración y el hecho de permanecer en un ambiente seco, podemos obviar que tomar agua constantemente es una de las cosas más importantes que tenemos que tener en cuenta y cumplir a rajatabla.

Siendo conscientes de esta información, podemos estar tranquilos haciendo uso del aire acondicionado para entrenar, porque si lo utilizamos de forma correcta, no solamente evitaremos que sea perjudicial para nuestra salud, sino que conseguiremos que sea beneficioso y nos ayude a no abandonar nuestra rutina de entrenamientos. ¡Que nada te frene!